por Ramon Dandrade
Tiempo de evaluación politica. De diagnóstico objetivo, certero y mentes profundas e integrales. Face de un proceso que requiere reflexión, inteligencia y competencia analítica. Capacidad prospectiva y planificación estratégica. Periodo para la acción unitaria y la programación consensuada. El uso del lenguaje llano y explicito y la diseminación de contenidos interconectados con los grandes problemas económicos y sociales de la población. Epoca de un discurso vinculado a las penurias y carestia de la familia Dominicana. De propuestas razonables y soluciones sencillas, comprensibles y persibidas como garantes de dominio y manejo de la problemática que generen confianza y eleven la credibilidad en el liderazgo politico. «Hoy disminuido» o no hay. Espacio para el surgimiento de un liderazgo con significado claro en la solución de los graves problemas del Pais. Quien mejor represente la solución tendrá la posibilidad de ganar las elecciones.
Reyna la confusión y la apatia.
Mientras los opositores al gobierno se preparan para la batalla, la confusión reina entre los electores. En la calle todo es epeculación sobre quien o quienes serán los candidatos. En la mente de muchos electores el nuevo liderazgo del nieto de trujillo, Avinadel, etc. Del lado oficial o del partido de gobierno PLD, Leonel Fernandez y el actual presidente Danilo Medina. El pueblo tiene que clamar por un candidato unitario, para enfrentar la mafia del PLD, ahi está la posibilidad del triunfo complementado, por supuesto, con un programa de gobierno viable y consensuado. Con propuestas claras y espesíficas para solucionar los problemas con la justicia sobre la impunidad de los corruptos, ladrones, la delincuencia y la terrible inseguridad que cada dia esta peor.
Con esto, el segmento opositor seria claramente mayoritario pero para motivarlo e incorporarlo a una campaña nacional por todos los rincones, se necesitan conducta de liderazgo que proyecten una imagen de preocupación por el País y prioricen los grandes intereses colectivos. Este podria ser el principal reto del liderazgo alternativo al actual presidente Danilo Medina, Leonel Fernandez y todos los que componen la directiva del PLD. Para esto se requiere sobre todo actitudes unitarias desprendidas y aceptables. El descredito del PLD y toda la dirigencia que la componen se ha multiplicado impresionantemente y esto se observa en la calle y en todas las conversaciones cotidianas y en los cientos de miles que han respaldado las marchas verdes.
El factor Dominguez Trujillo.
Con respecto a su candidatura, está tomando cuerpo en vastos sectores de la sociedad, el factor Dominguez Trujillo también pudiera capitalizar el generalizado descontento de los Dominicanos consados de los mismos partidos politicos, buscarian otra arternativa aglutinándose para demostrar el antipeledeismo. Tambien Trujillo, podria arrastrar la abstención y atraer incluso gruesos sectores de las clases mas desposeidas, que verian en su personalidad simbolizar una administración pública eficaz y honesta frente al desastre de incompetencia, despilfarro y la alarmante corrupción, malos servicios públicos y gigantesca e ineficiente burocracia.
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