Las empresas importantes, de prestigio y marca mundial mantienen un seguimiento contínuo o periódico midiendo la tendencia de mercado, cómo piensa el consumidor, imagen de marca y posicionamiento además de medír la fuerza de los competidores. Cuidan mucho del capital invertido como principal preocupación. Los datos e informaciones obtenidos sirven para elaborar nuestras estrategias, rediseñar y mejorar procesos. De igual manera actúan las diferentes organizaciones de la sociedad incluidos los partidos porque en competencia nadie se duerme.
En estudio de proyectos nuevo o en marcha se levantan informaciones básicas y necesarias, se evalúan las variables y se toman decisiones en cuanto a la factibilidad, buscando siempre la rentabilidad o utilidad que es el objetivo primordial de los inversionistas que nunca quieren perder su dinero.
El pueblo durante cuatro años va estudiando propuestas, midiendo comportamiento y actuaciones, evaluando alternativas y al final escoger la que mejor y más le favorece para el próximo cuatrienio de gobierno, porque es cauteloso en la inversión de su voto, esperanza y el futuro de toda la familia, buscando mejorar sus condiciones materiales de existencia. El votante nunca quiere jugar a la suerte porque siempre quiere ganar. Los sectores de la sociedad más despiertos y convencidos dedican grandes esfuerzos e incluso importantes recursos económicos para asegurar el triunfo de su candidatura. Se contempla que cerca de los comicios electorales la mayoría de votantes se vuelca o inclina a votar por la candidatura de mayor posibilidad.
Los indicadores positivos señalan e indican que un proyecto es bueno, realista y factible. Cada día la mayor franja poblacional percibe y se inclina por una salida o vía clara, concreta, confiable y veraz para seguír recorriendo el mismo camino seguro y objetivo, porque los hechos están demostrando que los pobres avanzan, hay inclusión de sectores marginados en el ayer y ven que tiene sentido la participación y reconocimiento de los derechos generales con políticas incluyentes e integradoras. El pueblo y los empresarios coinciden en invertír sus expectativas partiendo de la realidad de los hechos que viven en la actualidad. Tienen en sus manos los mejores indicadores para asegurar un futuro sólido.
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